[Foto Chávez, 2014]
Abarrotes
Por Larizza Arvizo
Chihuahua,
Chih. 6 de octubre de 2014.
Ing. Alejandro
Moreno R.
Presente
Después de extenderle
un caluroso saludo (soñando se convierta en chingazo), me dirijo
a usted, mi muy estimado ingeniero Alejandro Moreno R. para
hacer de su conocimiento que por motivos de salud me es imposible
seguir laborándole a usted: a falta de horario de comida, por no tener ni un
solo día completo de descanso; por la ausencia de vacaciones desde hace tres años
y la carencia de salario; pero primordialmente, mi salud
la cual se ve mermada en extremecía, con un probable cuadro de embarazo.
Me retiro de
este su negocio para vivir mi vida; en mi refrigerador la comida es mítica, así
que vine a laborar sin desayuno, mi estómago se encoge, y mis mascotas tienen
también mucha hambre. Este negocio, el cual para usted es suyo, de usted y solo
suyo, en mayor porcentaje porque según dijo
le metió mucho dinero, pero nunca ha trabajado en él, desde su fundación lo he
atendido yo personalmente.
Entendiendo
que mi trabajo no cuenta, y que a sus ojos soy yo una loca, mal agradecida, y
no merezco sino el 5 % de la tienda de abarrotes
que juntos abrimos, le suplico me evite esa humillación y
se limite a no hacer sonar mi teléfono
celular jamás.
Esperando
encuentre otra empleada mejor que yo, se despide de usted quien se lleva lo mejor de ambos en su vientre.
Atentamente
__________________________
Eleonora
Romo
Antes de los Oxxos existieron en Chihuahua las tiendas de la esquina, donde el drama humano parecía más cerca del corazón y del correo. Larizza algo sabe de eso.
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