Cocodrilo Bit
Ediciones de autor
Por Benito Rosales
El gusto por escribir y publicar libros me ha llevado a descubrir un mundo que mucho tiempo me había sido ajeno. Tarde años en darme cuenta de lo que era un escritor independiente, asumirse como uno, y reconocer su alcance y limitaciones.
Lo poco que sé de la industria editorial lo adquirí en base a mi propio esfuerzo. En los talleres literarios donde me ha tocado participar, poco o nada se habla de las editoriales. La atención ha sido en poemas y los cuentos, en la obra; pero no de la parte de llevarlos escritos a los libros.
Hablar del tema es poco claro, la conversación se llena de dudas, quizá porque se mezclan otros intereses, no solo los que van relacionados con el valor, o no valor, de la obra, sino de dinero y relaciones de poder.
Hoy hablaré entonces de las ediciones de autor.
Con la crisis financiera de la mayoría de las editoriales, si no es que todas, lograr que una editorial en forma te publique un libro es difícil: las apuestas son a escritores consagrados, a libros donde el riesgo de no venderlos sea menor.
En cambio, un escritor independiente es cualquier cosa menos garantía de ventas: un desconocido a quien más allá de su círculo de amistades y familiares cercanos nadie leerá, salvo en honrosos casos.
En este contexto, una vía para dar a conocer la obra son las ediciones de autor, que no son otra cosa que una edición asumida completamente por el autor.
Cuando un escritor llega a un acuerdo con una editorial, esta asume tareas que van más allá de los textos, como la presentación física del libro, el marketing, la distribución, etcétera. El autor se concentra en el contenido, en el desarrollo del escrito, pero el diseño del libro, de las pastas, de la tipografía, es de la editorial.
Esto libera al autor para concentrarlo en su oficio: la creación de obra.
La desventaja en este tipo de acuerdos es que el autor solo obtiene un porcentaje de las ventas, el cual es mínimo: la ley federal de derechos de autor establece un 10%, lo cual resulta claramente injusto. Si bien no está invirtiendo dinero por la publicación de su libro, las ganancias que obtiene son mínimas.
¿Entonces es mejor realizar ediciones de autor?
En principio: no. El oficio de un escritor es crear una obra literaria. No es vendedor. No es diseñador de marketing. No es editor. No es promotor cultural. No es facilitador de lectura. Aunque haya personas que sí compartan estos perfiles, no son la mayoría, y publicar en solitario un libro representa asumir todos estos perfiles.
Es todo un reto la promoción, distribución y venta, lo cual limita en el alcance que va a tener la obra en su socialización con la comunidad literaria.
Y si a esto agregamos que en México se lee poco, que la industria editorial está mermada y la escasa preocupación de los gobiernos en que se lea, que haya libros, y que los libros sean del país, el escritor independiente está condenado hacer doble o esfuerzo para dar a conocer su obra.
De ahí el gran valor de quien lo intenta.
Les comparto algunos artículos electrónicos para quien desee ampliar el tema:
https://www.lajornadamaya.mx/opinion/214659/que-es-una-edicion-de-autor-autopublicacion-editor-escritor-libro
https://www.alexlib.com/que-es-un-autoeditor.htm
https://www.easdalcoi.es/es/proyectos/edicion-de-autor/
Monterrey 25 febrero 2024
Benito Rosales Barrientos nació en Monterrey, ha participado en talleres literarios de su ciudad natal. Es autor de los libros: Sobre la cornisa del laberinto, poemas; Cuando estos cielos caigan como ojos de gato, poemas; Las flores del jardín, cuento, 2017; La niña y la serpiente, cuento, entre otros.
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