Por
Ysla Campbell
Me
queda el buen recuerdo
del
desayuno hacerte,
y el
pan que te llevaste,
haberte
envuelto en mieles;
poner
tu ropa limpia
en la
mochila verde,
y
jabones y azahares
y
cepillo de dientes.
Pero
no has vuelto, hijo,
y
espero por las tardes,
y me
angustio y no vivo,
y no
tengo otro ángel.
Que
vean el arcoíris
tus
bellos ojos tristes,
que
tus cabellos negros
se
esparzan en el sol.
Quisiera
consolarme,
pero
no puedo, hijo,
prefiero
yo pensar
que
todavía estás vivo,
que
vendrás un día de estos
y que
veré a mi niño
dando
vuelta a la esquina
brillante
con su libro,
en las
manos de Dios.
Ysla Campbell compuso una obra dramática de carácter religioso: San Lorenzo, que se representó ante 2000
espectadores frente al atrio de la iglesia. Es doctora en literatura y tiene un
corpus impresionante de libros publicados de teatro clásico y de teoría
literaria en la UACJ. También ha publicado:
Dos ediciones del Cancionero de
Guillermo Prieto. Universidad Veracruzana, México, 1990.
La vida es sueño a la luz del pensamiento neoestoico tacitista. El
Colegio de México, México, 1990.
La interpretación de Calderón en la imprenta y en la escena. Frankurt:
Iberoamericana/Vervuet, Madrid, 2008.
La tradición griega en Guerra en el paraíso, de Carlos Montemayor.
Gobierno de Navarra, España, 1996.
Ysla, poeta de Chihuahua, leyó en ciudad Juárez el jueves 20 de noviembre poemas que compuso por Ayotzinapa. Este es uno de esos textos.
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