sábado, 19 de septiembre de 2020

Didier Emmanuel Ortiz Chávez. Presentación del libro Aventuras de coctel segunda edición

 


Presentación del libro Aventuras de coctel segunda edición

 

 

Por Didier Emmanuel Ortiz Chávez

 

 

Autoridades del instituto Chihuahuense de la cultura, maestro Jesús Chávez Marín, compañeras en la mesa de presentadores, y público que nos acompaña.

 

1. Una linda mujer que trabaja en la maquila-

Irma es una operadora hábil y rápida, sus dedos vuelan sobre la línea de montaje conectando con precisión hasta cincuenta circuitos por minuto; los siguientes dos minutos permanece inactiva, pero alerta, sin perder el ritmo necesario para el siguiente minuto de frenética actividad. Le prometieron que pronto le darán su nombramiento de supervisora, lo cual significa que ganará casi el doble, pero hay algo que le preocupa y la tiene confundida. Pero procura no pensar en esto, para no perder la concentración.

Alguna vez les ha pasado que comienzan a escuchar una historia o relato y sienten esa curiosidad por saber más, avanzar en la trama, conocer el final y saber por que ocurrió así. O como los de sangre Millenial lo sabemos “ver series en Netflix un episodio tras otro”. Eso es Aventuras de coctel, un libro dividido en 45 episodios (relatos) escrito con las palabras y estructura que te atrapa y te invita a continuar la lectura, aun cuando el reloj avanza en la madrugada y las Modelo Especial disminuyen en el refrigerador.

Voy a realizar el análisis dividido también en tres partes (igual que Aventuras de coctel), solo que en mi caso y para efectos de esta presentación titularemos de la siguiente forma.

1.     La ventana al pasado parece un espejo

2.     Una cita con Chávez

3.     Si este es el futuro mejor me espero otro rato

 

Comenzamos.

 

 

Uno. La ventana al pasado parece un espejo.

 

A través de las palabras, el autor nos lleva a un recorrido por historias y anécdotas que tienen como protagonistas a diversos artistas de la ciudad de Chihuahua (y uno que otro de fuera). Qué pasaría si de pronto tomáramos una máquina del tiempo y viajáramos 30 años atrás para darnos cuenta de que las cosas no han cambiado mucho, al menos en la forma de pensar y actuar de artistas en la ciudad.

Las historias de esta primer parte suceden entre 1984 y 1995, y nos dan una visión entretenida de sucesos ocurridos, que por comportamiento y desarrollo de la historia, pudiéramos vivir  aun en esta fecha. Así entonces encontramos:

-Anécdotas con ese toque característico que emulando al titulo del primer relato;  exclaman en voz alta: “Jesús Chávez washere”. Donde al haber compartido un sinfín de anécdotas con el autor, me surge la duda, o Jesús Chávez Marín escribe como habla o habla como escribe. Cualquiera de las dos, qué placer disfrutar de ambas. 

Tenemos también:

-Encuentros de escritores: con buenas intenciones, desfile de vanidades, desveladas entre literatos, ausentismo en la presentación de las 8, galletitas con café diluido, bolsa de trabajo para algunos escritores sin chamba y clausura protocolaria ovacionada por sillas vacías.

Además de:

-Proyectos bienintencionados. Esperanzadores. Con estructura pensada, un equipo talentoso, una idea clara y ganadora, un costal de ilusiones y un choque de realidades. Revistas, libros, presentaciones, galerías y exhibiciones musicales, todas ellas con una historia interesante de fondo.

Y por ultimo ¿Por qué no?

-Un toque de política para sazonar. Desde el nacimiento del Instituto Chihuahuense de la Cultura con la presencia del entonces presidente Carlos Salinas de Gortari, hasta la noche triste del PRI, cuando en un edifico de la Calle Pacheco, a las 2 de la madrugada en una conferencia de prensa repleta de caras largas, aceptan la derrota de su candidato a gobernador, vencido por un enérgico panista juarense, y no, no es la noche triste del PRI del año pasado, sino la otra noche triste en 1992.

¿Ven como la ventana al pasado ahí parece un espejo de la realidad actual?

 

 

Dos. Una cita con Chávez

 

Hay viajes en que se disfruta más el camino que el destino, historias con mejor contexto que contenido, cenas con excelente compañía y poco talento gastronómico. Y obras de teatro en que divierte más la reseña que la puesta en escena. En la segunda parte los invito a todos ustedes al teatro, cortesía y en compañía de un admirador y analista experto de las artes escénicas. Disfrutando de obras y muestras presentadas entre el 84 y 91, transportadas en el tiempo a través de las palabras que darán una nueva forma de disfrutarlas. Conociendo las dificultades de producción, las implicaciones problemas de presupuesto, el talento de actores, músicos escenógrafos, productores, y la importancia de una buena dirección.

Vamos al teatro del pasado, Chávez invita.

 

 

Tres. Si este es el futuro mejor me espero otro rato

 

-Los lunes es más difícil levantarse. Irma escuchó el timbre del despertador y decidió quedarse acostada cinco minutos más. La noche del sábado se había ido de parranda con Esteban al baile donde tocó el grupo Furia Norteña, en La Fe Music Hall, y todavía hoy lunes la mujer resentía los efectos de la tormentosa desvelada. Pero ni modo.

 

La ciudad industrial en la que vivimos comenzó a construirse muchos años atrás, con esperanzas de prosperidad y oportunidades para la sociedad chihuahuense, entender el pasado  nos ayuda a tomar acción sobre el presente y plantear el futuro. No hay mejor forma de prosperidad que conocer el entorno y lo que nos trajo a esto. Se describen a detalle historias alrededor de cómo llegamos a ser la ciudad que hoy en día somos. Entonces podemos entender cómo se edificaron dos pilares importantes de la sociedad actual, el industrial y el literario, este segundo a manos de sus protagonistas, guerreros que con lápiz y máquina de escribir Olympus como armas de guerra, lograron luchar para que una ciudad industrial no perdiera la esencia de: Ciudad Literaria.

Aventuras de coctel se presenta en su segunda edición 20 años después, y sigue representando a un segmento de la sociedad que ve el mundo de forma diferente.

En el año 2004, en una clase de mi carrera en Artes Visuales, el profesor de la materia de ilustración encargó el proyecto de realizar una acuarela basada en un libro. Tomé la primera edición de este libro con una portada amarilla, comencé a estudiarlo y el resultado de la obra fue una dramatización irónica de todo lo que no es la vida cultural, pero en algún momento lo fue.

No vamos a entrar en calidad pictográfica de esa pieza porque el dibujo y la ilustración nunca ha sido lo mío. Pero si retomo esto como una forma de analizar lo que tal vez no tengamos claridad por lo que venga, la certeza del futuro no existe, pero conocer las raíces y algunas historias de cómo pasó y cómo llegamos aquí, nos ayudará a entender mejor donde estamos y adaptarnos a lo que viene.

 

Por último, respecto a Aventuras de coctel, yo los invito:

-Si ya lo leíste, comparte.

-A los que su nombre esta en las paginas, recordar es volver a vivir

-A los de gustos exigentes que tienen la duda, dale una oportunidad.

-Si aún no lo han leído, ¿qué esperas?

 

Ah, por cierto, y aprovechando que me quedan unos minutos.

¿Se acuerdan de Irma? La operadora, se fue de fiesta, será supervisora pero tiene un problema, prefiere no pensar en ello. ¿Quieres saber qué pasó, y cuál era su problema?

La respuesta a eso, y el desarrollo de muchas historias aquí citadas, está en Aventuras de coctel segunda edición, de Jesús Chávez Marín. Muchas gracias.

 

Junio del 2017

 

 

 

 

Didier Emmanuel Ortiz Chávez es licenciado en artes visuales por la Universidad Palmore. Tiene una maestría en relaciones comerciales por el Instituto Tecnológico de Chihuahua. Es fotógrafo y productor de programas de televisión. Entre los que ha producido están Enfoque y El Show de Maguie. Actualmente tiene una empresa de investigación de mercado y es profesor en la Universidad de Durango campus Chihuahua.

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