miércoles, 19 de diciembre de 2018

Enrique Alfonso Reyes Siáñez. Tatuajes: pigmentación con significado

Tatuajes: pigmentación con significado.

Por Enrique Alfonso Reyes Siáñez

A través del tiempo el género humano ha requerido utilizar ciertos rasgos para distinguirse de sus semejantes, diversos factores sociales influyen, de tal manera que se forjan características propias de una estirpe que contribuye a un criterio que tal vez sea un tabú social.
Es posible que nos enfrentemos a un dictamen discriminatorio, en el sentido de una sanción por la apariencia. Por tanto, es importante revisar algunos aspectos que van a forjar la consciencia social del tatuaje; a simple vista lo que llama la atención es la censura al portar un grabado en la piel.
Esto nos lleva a reflexionar en un punto que es primordial en relación al significado que representa para el usuario, sin embargo es evidente que existe un rechazo e incluso lugares o profesiones donde las personas que traen este tipo de grabados son víctimas de advertencias o discriminación social.
Hay antecedentes de que en épocas anteriores se estilizaba el tatuaje como una característica de estatus social, es decir, a través de la historia ha tenido una evolución importante hasta llegar hacer un valor estético, logrando con esto difundir una postura frente a los ambientes sociales. Un ejemplo diáfano son las tribus urbanas donde sus integrantes suelen portar tatuajes para especificar su jerarquía dentro del grupo.
Los tatuajes en la actualidad son grabados sobre el cuerpo mano facturados con tintes que mediante agujas se graban en la epidermis para diseñar dibujos permanentes o temporales; es evidente que es una incrustación a través de pequeñas picaduras o punzadas causando una herida.
Posiblemente el dolor  sea un ingredientes apremiantes y significativos, más sin embargo se piensa que ese tipo de ornamentos tiene un cierto riesgo para la salud. Por esa razón se exige cierta certificación en la aplicación, por el simple hecho de que es micro cirugía, y se exige tener higiene, primordialmente en la intervención de las agujas.
Siempre es interesante el cuidado durante y después de la aplicación; la sutileza del caso es mantener la pigmentación en buenas condiciones para que se logre el grabado, y por supuesto su permanencia en la piel.
Echando un vistazo a épocas pasadas, vemos que el tatuaje tiene un significado de protesta, hasta se puede decir que viene a hacer un distintivo, porque son representaciones entre la vida y la muerte, en ese caso revisaremos su relación con la cultura de cada época.
Algunos expertos en el tema señalan que la portación del tatuaje es una manera de expresión de la persona, representaciones a través de dibujos en la epidermis; su aplicación se realiza con agujas que varían su pigmentación.
Tomando en cuenta que el tatuaje era parte de un ritual que significaba el paso de la pubertad a la adultez, esto es que la edad propicia es la juventud, ya que los dibujos exploran: religión, formas estéticas, fauna, flora, muerte entre otros.
Reflexionar la importancia de estos dibujos que son incrustados sobre la piel y diversas pigmentaciones, es explorar la preferencia de elección de determinadas imágenes que forman un conjunto de caracteres personales en los diversos partes del cuerpo; el público que abarca es de diversos extractos sociales.
Al parecer existen diversos estilos de tatuaje que establecen un mensaje a través del gráfico o dibujo, por lo tanto, es pertinente mencionar que cada estilo está definido en el trazo, pigmentación y por el grado de picadura en la epidermis.
El usuario tiene conocimiento de los riesgos a la salud.
Un factor esencial es el criterio personal donde fragua la idea que se desprende del pensamiento social. Algunas de las imágenes que se presentan tienen un cierto grado de violencia tanto en el material como el diseño del tatuaje.
Dicha pigmentación surge de la consciencia social, pues es la elección que se efectúa mediante del criterio personal, y en este sentido se va generar controversia que radica en el libre albedrió de cada persona, lo que resulta de la diversidad de pensamiento.



Enrique Alfonso Reyes Siáñez es licenciado en letras españolas por la Universidad Autónoma de Chihuahua, donde también tiene maestría en educación superior. Algunas de sus publicaciones son: Sendero de amor (Colección de poemas1998) Rocío de sentimiento (Colección de poemas 1999) Estudio de los valores éticos, un acercamiento al universo de los valores (2000).

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