Análisis para presentación de libro El tren Chihuahua al Pacífico
Por Didier Emmanuel Ortiz Chávez
Una obra narrativa de anécdotas y relatos que entre sus páginas esconde algunos tintes autobiográficos. El libro atrapa, aviva emociones con el toque ya característico del autor.
Voy a compartir una experiencia personal. Desde el momento que Chávez me invita a ser nuevamente uno de los presentadores de su libro, lo cual agradezco; para mí es un compromiso, la primera vez que tomo el libro, abro una página al azar y me encuentro con esto:
Arte de la Fotografía
Relato 49. Página 25
Agua que se imagina en el aire y al impulso de su acalorado pensamiento, vuela. Casas que allá lejos parecen dibujos de una niña cuidadosa y en la vida guardan ilusiones y los amores de sus habitantes. Verde oscuro de la floresta que desprende los últimos minutos de noche, por donde camina con vigor el fotógrafo, quien extiende el ángulo de su mirada y concentra su alma en la primera estampa del día.
En ese primer relato leído encontré una de las esencias del libro, ya que me identifico tanto en ese tiempo y espacio que fácilmente pude trasladarme a diferentes épocas de mi vida. Por eso cuando menciono que los relatos tienen tintes autobiográficos escondidos, no me refiero exclusivamente a vivencias de quien lo escribe, sino percepciones de quien los lee.
¿Cuál es tu historia? Basado en tu situación del presente, pasado o futuro Aquí tienes 100 diferentes para encontrar la tuya.
Voy a fragmentar esto en dos partes.
Primero. Botanas literarias
Llegas a un evento social de mediana alcurnia y se ofrecen al centro de la mesa bocadillos en los que tenemos variedad: algunos panecitos rellenos y decorados artesanalmente uno por uno, trozos de carnes frías, quesos y embutidos. Tenemos por otro lado empanadas con mermelada frutal, chocolates dignos del mejor repostero, dulces pequeños para aquellos que quieren cuidar las apariencias, cacahuates salados y enchilados para los que en el corazón aun guardamos barrio.
No importa si comes solo de una variedad, o pruebas uno y luego otro. Unos los disfrutan en orden otros incluso mezclan, alternan. Al final todos los que se sienten en la mesa lo van a disfrutar, cada quien a su forma, tiempo y cantidad.
Lo mismo sucede con los 100 relatos breves de este libro. Hay diversidad en temas, historias, personajes, espacios, situaciones. Puedes leerlos en el orden que quieras, dándote tu tiempo para disfrutarlo y digerirlo; o todos seguidos, uno tras otro. Te aseguro que igual apreciarás estas botanas literarias. ¿Se te antoja?
Segundo. Las estaciones de la vida. ¿Coincidencia?
Recorriendo las páginas y escondido entre la selección de palabras de Chávez Marín, puedes hallar los relatos que se identifiquen con tu situación e incluso, ¿por que no?, con la temporada y estación en que vivimos. Te invito a dar un breve recorrido por ellas, a través de algunos de los textos del libro.
Primavera. La Infancia
Antes había niños que en la edad del ¿por qué? solucionaban sus dudas con los más grandes, padres, abuelos, tíos, o quien estuviera cerca, que fuera más alto. La nueva generación nace en una era de información en donde la respuesta a todas sus dudas esta a tres clicks de distancia. Y eso nos lleva a:
32. Cada vez se pone más difícil ser abuelo
―Ya dejen el Nintento, voy a llevarlos por una nieve al Supercoldy.
―Claro que no, abuela. El Nintendo ya ni existe y esa es pura manteca con azúcar, tiene un millón de calorias.
Verano. La Juventud
Nuevas generaciones con una conectividad permanente que en una computadora o desde su celular logran hacer una vida. Trabajo. Familia. Pareja. Amigos. Y todo con la opción de ni siquiera salir de casa. Viven atrapados en:
26. Las Redes
Pregunta Jennifer a su amiga Kimberly:
―Oyes y tu novio ¿es virtual o presencial?
Otoño. Ser Adulto
Llegamos a una edad adulta donde surgen obligaciones y responsabilidades, necesitamos un empleo, el dinero es parte esencial, el pelo cae, la barriga crece y lo peor: Pagamos impuestos. Al menos todos los que no estan en condición de:
2. Desempleo
Un comunicólogo, dos ingenieros, tres abogados y cuatro administradores de empresa coincidieron en un curso de capacitación de clase mundial que duró una semana. Buscaban trabajo. Al final les ofrecieron un puesto de vendedores por Internet. El mega monopolio de la oscilante revolución digital dejó que sus ilusiones profesionales mordieran el polvo.
A esta lista agregaria algo: Tres diseñadores gráficos, dos enfermeras, un programador, dos publicistas, tres contadoras, un periodista, dos ingenieros, tres cocineros, dos repartidores, un electricista, dos maestros, tres fotográfos, dos musicos, un nutriólogo, dos abogados, tres mecánicos, dos carpinteros, un jardinero, dos estilistas, tres pintores, dos fontaneros un zapatero, dos vendedores.
Invierno. Vejez
Destino ineludible o constante comienzo con más experiencia. No lo sé, es cuestión de enfoque y actitud. Porque al llegar, lo que tenemos es producto de nuestras acciones en el preludio al lugar donde:
92. Se destilaron las historias
En la mirada de un buho la noche vuela; cae ligera como agua la memoria y una lluvia de secretos se va posando en el rocío al amanecer.
Y es así como paso a paso vamos recorriendo un camino de enseñanzas y emociones a través de los relatos, con ese toque para encajar justo en vivencias personales, memorias escondidas, sensaciones compartidas y situaciones actuales que vemos en el día a día. ¿Una prueba más? En el relato 28 sale José José.
Muchas gracias y disfruten de su viaje en El tren Chihuahua al Pacifico.
Chávez Marín, Jesús: El tren Chihuahua al Pacifico. Editorial Tinta Nueva, México, 2019.
Didier Emmanuel Ortiz Chávez es licenciado en artes visuales por la Universidad Palmore. Tiene una maestría en relaciones comerciales por el Instituto Tecnológico de Chihuahua. Es fotógrafo y productor de programas de televisión. Entre los que ha producido están Enfoque y El Show de Maguie. Actualmente tiene una empresa de investigación de mercado y es profesor en la Universidad de Durango campus Chihuahua.
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