Lluvia de estrellas
Por Heriberto Ramírez Luján
Unos brazos fuertes y amorosos me arrancaron de mi profundo letargo, me envolvieron en una cálida cobija y salí en ellos hacia una fresca madrugada. Eléctricos, perplejidades celestiales para alguien que no conocía la pirotecnia, ni siquiera la luz eléctrica. Mis ojos no podían dar crédito a lo que veían: del cielo se desprendían miríadas de luces multicolores, azules, naranjas, verdes, que parecían alcanzarnos.
De lo lejos, surcando la llanura se escuchó el silbato del tren que llegaba de Topolobampo al fin de su ruta.
Siempre agradeceré esa visión de un cosmos vivo y sorprendente como nunca he vuelto a ver.
Heriberto Ramírez Luján, filósofo mexicano, redacta la lógica con precisión de cirujano. En sus ensayos y libros de filosofía y también en sus textos literarios. Sobrio y elegante profesor, el estoicismo es divisa de su estética. Y de su gran estilo.
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